Ratatouille (2007): La estética de lo absurdo

Por: Joelgro Pr

Confieso que tengo una manía cinéfila de ordenar y escribir en el calendario de mi celular las películas que quiero ver. Según yo, tengo que cumplirlas de acuerdo al cronograma desfasado que tengo como si tendría cumplir algún trabajo o responsabilidad, creo que es una cosa “extravagante” pero lo disfruto hacerlo como un infante ve volar un globo cada instante.

Hace muchos meses seguidos ya vengo acostumbrado a tener en mi lista películas retro de “horror”,” Thriller” o “ciencia ficción”, las cuales me fascinan, pero por alguna razón, quise alterar esa incesante serie de films que divisiva a lo largo de pre y post cuarentena total.

Una noche revisando que me tocaba ver Tesis (1996) de Alejandro Amenábar, decidí cambiarlo por algo más sutil, aventurera y alegre de algo más que solo misterio o terror. Y vi en uno de los grupos donde estoy de Facebook que estaban haciendo unas efemérides de una película de Pixar estrenada en junio del 2007. La cual era una película que ya había visto y gustado de niño, pero como dicen: para apreciar una película necesitas verla más de una vez.

Fuente: Moviemania

Seguramente has visto o, por lo menos; escuchado hablar de la película animada Ratatoulle. Este gran film de cocina es quizá el que mejor retrata todo acerca del arte culinario, por algo no es considerada una de las mejores películas de cocina.

Una película inspiradora

La película trata de una rata (Remy) que desea convertirse en chef a pesar de que es un animal no demasiado bienvenido en el mundo de la cocina, pero con don del buen olfato y el gusto por está misma. Para intentar lograr su sueño, se colará en la cocina del restaurante parisino de su ídolo, el fallecido cocinero Auguste Gusteau. Pero esto sólo le será posible a través de un aprendiz humano (Alfredo Linguini) o su marioneta en esta historia, ambos logrando un propósito compartido en dirección a un sólo fin, el reconocimiento.

Ha sido ganadora de un Oscar a Mejor película de animación en 2007 | Fuente: Wattpad

A primera instancia no recordaba la trama de Ratatoulle. Pasando más de media hora viendo el film, comencé a entender el hilo de la narrativa y me pasó algo curioso, algo que antes ¡no me pasaba!, quizá porque mi perspectiva de niño no me dejaba ver otros aspectos de la película cuando la vi por primera vez. Mi pregunta fue: ¿a quién no le va a dar asco la idea de que haya una rata en la cocina y que encima sea la encargada de hacer lo que te vas a comer?

Me consta que hay gente que no puede superar ese detalle, ya que el mundo del arte culinario está caracterizado por la pulcritud y garantizar la salud de los comensales. Obviamente pensé que era una idea un poco absurda y osada, claro, era una película para niños, ellos no lo podían enfocar de esa forma.

Así que continúe viéndola hasta que llegue a la escena donde luego que la colonia de ratas robará comida de la casa de una anciana. El protagonista narraba mediante una voz en Off sus problemas existenciales en torno a los hechos sucedidos.

Remy y Django en uno de los diálogos | Fuente: Reddit.com

Dialogo en voz en off de Remy:

—Django: En primera, no somos ladrones. En segunda, aléjate de la cocina y de los humanos, es peligroso.

—Remy: Sé que debería odiar a los humanos, pero, hay algo en especial en ellos, ¡no solo sobreviven! ¡también descubren!, ¡crean! ¡Solo miren lo que hacen con la comida!

Allí fue la escena de la película que me atrapo tajantemente, donde el protagonista (Remy) y su padre (Django) tienen un dialogo formidable luego que Remy estuviera inconforme y cuestionará su accionar de su vida cotidiana en las alcantarillas.

A pesar que en un inicio me pareció anticuada por parte del director Brad Bird apostará por un animal no muy bienvenido en la cocina, al terminarla de ver, la película me pareció una obra de arte, tanto que podría considerarla de una animación de culto. Pero es que la forma de llevar la historia de Remy es una maravilla.

Otras de las notables escenas de esta película, y la que ¡me fascino! es la ansiada espera de la publicación que Anton Ego, un temido crítico gastronómico, que describe uno de los discursos fílmicos más recordados de la pantalla grande.

Anton Ego en el memorable monólogo que cierra Ratatouille:

  • Prosperamos con las críticas negativas, divertidas de escribir y de leer; pero la triste verdad que debemos afrontar es que, en el gran orden de las cosas, cualquier basura tiene más significado que lo que deja ver nuestra crítica.
  • Pero en ocasiones el crítico si se arriesga cada vez que descubre y defiende algo nuevo. El mundo suele ser cruel con el nuevo talento, las nuevas creaciones. Lo nuevo, necesita amigos.
Escena donde Anton Ego prueba el Ratatoulle de Remy | Fuente: mx.toluna.com

Probablemente esa escena de flashback sea una de las mejores escenas que haya visto en mi vida, con un sólido y reflexivo monólogo de Anton Ego. Una crítica a la crítica totalmente y humanamente sutil.

Podría agregar también, sí bien lo gastronómico es el punto donde radica la historia de los personajes, también expresa otros diversos temas. Como el emprendimiento, el egocentrismo, los celos, la inconformidad, los prejuicios, así como también el carácter y lo sobresaliente de la mujer, la importancia del apoyo familiar y la empatía.

Fuente: deviantart.com

Un relato que conmueve, cuando se conoce el entorno que envuelve esta película cómica, encantadora, aleccionadora, sobre todo para todo aquel que tenga un carácter emprendedor, además es técnicamente imponente con una buena banda sonora, guion y una buena fotografía, etc. Sin más que mencionar, sí ya la han visto, vuélvanla a ver con otra perspectiva, una obra maestra del cine de animación.


Disponible: https://pelisplus.me/pelicula/ratatouille/

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